Quería escribir sobre la perfección y la exigencia. Sobre todo esto me vino a la cabeza cuando el pasado domingo mandé la newsletter de inspiración del mes de mayo y salió como quiso salir. Me puse nerviosa en un primer momento. Le había dedicado tiempo, mimo, cariño y no había salido como yo quería. Me puse furiosa y me sentí frustrada pero ya sabemos que estas cosas nos ayudan a seguir revisándonos y a ver qué se está repitiendo. Me senté a escribir, meditar y lo saqué, lo saqué conversándolo en casa y dejando ir…
También quería hablar sobre rituales diarios, sobre cómo nos relacionamos con nosotras mismas y cómo nos cuidamos, nos alimentamos, nos mantenemos activas, cómo compaginar trabajo y ocio estando en casa (hablo de mi experiencia al final del artículo que os dejo aquí enlazado; es de hace algunos meses pero creo que podrá servir de inspiración).
De los cambios de planes. Del querer hacer cosas y no poder.
De qué uso le hemos dado a la tecnología durante este tiempo y cómo hemos desconectado o no. Del recurso del modo avión.
De la productividad, del parar y no hacer nada. De las prisas. Del HACER.
De todo aquello que íbamos a hacer y no hemos hecho pero también todo eso que sí hemos hecho y a lo que hemos regresado quizá después de años sin hacerlo. Ponernos a pintar, a bailar, hacer collage, recuperar el contacto con algunas personas, adentrarnos en nosotras mismas, escucharnos, parar… Y de ese dejar de hacer para escucharnos un poco más, adentrarnos en silencio dentro nuestro y ver qué hay ahí, sin huir.
De cómo administrar el tiempo y me ha resultado muy interesante lo que se explica en el libro de Stephen R. Covey de Los 7 hábitos de las personas altamente efectivas. Él divide el tiempo en 4 cuadrantes que organiza según las cosas a hacer sean importantes, urgentes, no importantes, no urgentes. Os recomiendo especialmente leer esta parte del libro porque a mí al menos me está ayudando a cambiar mi manera de enfrentarme a algunas tareas del día a día, sobre todo cuando me siento abrumada por la lista de “haceres” o “to do’s”.
También me apetecía referirme a cómo tras este tiempo confinados en casa, ha cambiado nuestra manera de vivir y relacionarnos con el tiempo, llevándonos a vivir en el momento presente. Vivir en el aquí y ahora, algo a lo que muchas veces aspiramos pero no logramos. Ahora mismo, en esta época que nos ha tocado vivir, no tenemos ni idea de lo que pasará mañana y eso sin duda nos ancla al presente. Siempre tratamos de hacer planes para mañana, para verano pero… ahora solo tenemos el momento que estamos viviendo ahora mismo.
El momento presente es lo único que tienes. Nunca hay un momento en tu vida que no sea “este momento”.
Estos días releía el famoso libro de Eckhart Tolle, El poder del ahora y es bonito reencontrarse con los párrafos que marcaste en anteriores lecturas.
Reflexiones sobre cómo hemos cambiado. No somos obviamente los mismos, las mismas.
Hoy me conozco un poquito más y conozco más a mis personas cercanas. Mi relación ha cambiado, conmigo, con los demás. Con los lugares, experiencias, actitudes mías…
¿Quién no se ha encontrado rechazando lo que llega de golpe para descubrir más tarde que no solo era el único camino posible sino el más cercano al corazón?
Haru, de Flavia Company.
Así empezaba nuestra travesía durante la cuarentena pero creo que es mucho lo que estamos descubriendo y creciendo y que, a pesar de aspectos dolorosos que se están atravesando por causa de la pandemia… es mucho lo que va a surgir de todo esto.
Como decía Greta Thunberg en uno de sus discursos:
Lo que hagamos o dejemos de hacer ahora afectará a toda mi vida y a la de mis hijos y nietos.
Lo único que hay que hacer es despertar y cambiar.
Lo que necesitamos es acción.
Puede que estemos despertando y estemos cambiando. Puede que este golpe, nos haya agitado lo suficiente como para caminar en otras direcciones y hacer lo que toca hacer.
Quería escribir de muchas cosas y por no poder decidir, aquí os las he compartido todas en pequeñas dosis.
¿Qué os dicen? ¿Hay algo que os resuena? ¿Qué opináis? ¿Cómo sentís todo esto? Será un placer leeros.
Para terminar, os dejo un par de preguntas por si os apetece reflexionar y escribir sobre ellas.
¿Qué deseas ser?
¿Qué deseas hacer?
Un abrazo,
Anna
Fotografías: Anna Alfaro / Esta última es de Sandra Rojo