No es la primera vez que hablo de esta supuesta “crisis” de lectura que padezco. Mejor que sea eso y no otra crisis de identidad (ya sufrimos bastante en la adolescencia con ello), o una crisis laboral, económica (que haberla la hay, pero tocamos madera y aún podemos sostenernos, dado como está todo…). Una crisis de este tipo… se puede llevar, no os diré lo contrario, aunque para una habitual lectora, devoradora voraz de libros, esta situación cansa un poco ya.
Y en esta búsqueda del libro “perfecto”, que por supuesto existir, existen muchos, no doy con el “mío”. Debe ser un momento de mi vida en el que interiormente no estoy nada predispuesta a la lectura, aunque me apetezca tantísimo. Serán cosas del inconsciente, que nunca lograré entender. Y para tratar de dar con él, voy pidiendo recomendaciones. No sé si me servirán de mucho, pero es valiosa la recopilación.
Muchos a mi alrededor sintieron verdaderos flechados con muchos de ellos y para ver si conmigo conseguirán lo mismo, me he adentrado en una labor detectivesca con todos ellos. Ánimo con la lectura y espero que encontréis el vuestro, como lo espero para mi también 😉
El Adverdsario, Emmanuel Carrère
El 9 de enero de 1993 un hombre mató a su esposa, sus hijos y sus padres, e intentó sin éxito suicidarse. La investigación reveló que no era médico, tal como pretendía. Mentía desde los dieciocho años y se había construido una existencia ficticia. A punto de ser descubierto, prefirió suprimir a aquellos cuya mirada no hubiera podido soportar. Una escalofriante historia real que es un viaje al corazón del horror y ha sido comparada con A sangre fría de Truman Capote.
La Playa, Alex Garland
La playa es un libro de aventuras, donde el protagonista es un viajero al que hablan de una playa perdida que es lo que mas se parece al Eden en este mundo. Se dedica a buscarla junto con dos amigos y cuando la encuentra resulta que alli vive un grupo de personas en plan comuna hippye. La mayor parte del libro habla de las relaciones que se establecen entre ellos, la organización de los trabajos… y como la locura se va apoderando de ellos.
Una temporada para silbar, Ivan Doing
“No cocina, pero tampoco muerde”. Así comienza el anuncio en el que Rose Llewellyn, una viuda de “buenas costumbres y disposición excepcional”, se ofrece en el otoño de 1909 como ama de llaves; la frase capta de inmediato la atención de Oliver Milliron, un viudo con tres hijos y poca maña en las tareas domésticas, que la contrata para poner un poco de orden en su casa de Marias Coulee, Montana.
Y así comienza también la inolvidable temporada que Rose y su hermano Morris, un dandi sabelotodo, pasarán en este pueblo de granjeros.
Donde el corazón te lleve, Susanna Tamaro
Viendo inminente el final de su vida, Olga decide escribir a su nieta una larga carta para dejar constancia de lo que ninguna de las dos ha sabido ni decir ni escuchar. Cuando la nieta regrese, sólo encontrará la relación de los pensamientos, sentimientos, delicadeza y esperanza, soledad y amargura que la vida ha ido tejiendo. Por la carta, se sabrá cuál fue la historia de la familia, las peleas con la hija muerta, los desencuentros y las heridas que nunca cicatrizaron.
Las cenizas de Ángela, Frank McCourt
La obra cuenta la infancia del propio autor, desde su nacimiento en Brooklyn, como primer hijo de Malachy y Angela McCourt. A la familia pronto se le sumaron varios hijos más: Malachy, los gemelos Oliver y Eugene, y una hermana, Margaret. Tras la muerte de la pequeña Margaret con tan sólo unas semanas de vida, sus padres deciden volver a su nativa Irlanda. Allí mueren también los dos gemelos, y nacen otros dos hijos, Michael y Alphie. La vida en Irlanda, y especialmente en Limerick, no era fácil en aquella época (años 30 y 40), y el libro la recoge con crudeza.
El tiempo entre costuras, María Dueñas
Una novela de amor y espionaje en el exotismo colonial de África.
La joven modista Sira Quiroga abandona Madrid en los meses convulsos previos al alzamiento arrastrada por el amor desbocado hacia un hombre a quien apenas conoce. Juntos se instalan en Tánger, una ciudad mundana, exótica y vibrante en la que todo lo impensable puede hacerse realidad. Incluso la traición y el abandono de la persona en quien ha depositado toda su confianza. El tiempo entre costuras es una aventura apasionante en la que los talleres de alta costura, el glamour de los grandes hoteles, las conspiraciones políticas y las oscuras misiones de los servicios secretos se funden con la lealtad hacia aquellos a quienes queremos y con el poder irrefrenable del amor.
La joven de la perla, Tracy Chevalier
En la segunda mitad del siglo XVII, el pintor holandés Johannes Vermeer inmortalizó en una tela a una bella muchacha adornada con un turbante y un pendiente de perla. Sus labios parecen esbozar una sonrisa sensual, pero sus ojos irradian la tristeza más profunda.
La joven de la perla es la historia de una fascinación, de cómo surge un sentimiento que se mueve entre la admiración y el amor. La luz en los ojos de Griet, la sirvienta convertida en musa, encierra el misterio más profundo en el proceso de creación de una obra de arte.
El hombre en busca de sentido, Viktor Frankl
Frankl, escribe este libro para explicar la experiencia que le llevó al descubrimiento de la logoterapia, que utiliza para encontrar aquellas razones que le hacen aferrarse a la vida y que, por cierto, todas las personas (sin excepción) tienen.
Las palabras del doctor Frankl alcanzan un temple esperanzador sobre la capacidad humana de trascender a sus dificultades y descubrir una verdad que ayuda a quererse a sí mismo y a quienes le rodean.
La vieja sirena, José Luis Sampedro
La vieja sirena se desarrolla en la Alejandría del siglo III y sigue la historia de tres personajes principales: una mujer que tendrá varios nombres; Ahram, un comerciante interesado en el poder; y Krito, un filósofo que a veces se siente hombre y a veces mujer. La novela desarrolla diversos temas: las luchas de poder, la vida en un mundo fronterizo, la aceptación de la muerte frente a la eternidad, y el amor.
Las peripecias de la mujer son el hilo principal del argumento en la primera parte, que comienza cuando llega a Alejandría y es vendida como esclava a Ahram, en cuya casa conoce a Krito, que trabaja para el comerciante.
Atlas de geografía humana, Almudena Grandes
Cuatro años le llevó a Almudena Grandes escribir su cuarta novela en la que cuatro mujeres cuentan en primera persona su propia historia en un tiempo de confusión ideológica y crisis generacional. Un tiempo que, sin duda, ni ellas mismas, ni los lectores atrapados en las redes de la novela, podrán olvidar.
Inés y la alegría, Almudena Grandes
Cuenta la historia de la invasión del valle de Arán, en octubre de 1944, por parte de un ejército de guerrilleros que se propusieron liberar a España. Una novela irrefrenable, sobre mujeres y hombres que lucharon con convicción por recuperar su país, sobrevivieron luego en el exilio y regresaron, tras la muerte de Franco, a una España desconocida e indiferente con su modesta epopeya.
Diario de invierno, Paul Auster
Un accidente infantil mientras jugaba al béisbol, el descubrimiento del sexo, las masturbaciones adolescentes y la primera experiencia sexual con una prostituta, la rememoración de sus padres, un accidente de coche en el que su mujer resulta herida, una presentación en Arles acompañado por su admirado Jean-Louis Trintignant, la estancia en París, una larga lista comentada de las 21 habitaciones en las que ha vivido a lo largo de su vida hasta llegar a su actual residencia en Park Slope, sus ataques de pánico, las historias de sus abuelos, sus dos primeros matrimonios fallidos y el largo y feliz matrimonio actual, la visión de un viejo thriller por televisión y las reflexiones que propicia, las visitas a la familia de Siri, los viajes, los paseos, la presencia de la nieve, el paso y la herida del tiempo, la conciencia del cuerpo que envejece…
En definitiva, el puzzle de una vida a través de vivencias, sensaciones y recuerdos. Un magistral autoretrato.
Gracias Eva, Idoia y Susana, Alexandre y Gemma C, por ayudarme a seguir insistiendo 🙂