Verano en Mallorca
Es común en todos que tan pronto como volvemos al trabajo, sintamos lo más lejanas nuestras vacaciones. Los días sin trabajar se pasan volando, como un huracán, pero aún más se nos antojan lejanos estos días cuando hemos vuelto a la rutina. Como si nunca hubiéramos parado a darnos un respiro, a tomarnos la vida sin prisa y a comer, andar y disfrutar de todo con calma y paz sin en ningún momento estar pendientes del reloj.
Hoy me paro a pensar en esos bonitos días de verano, que no tan lejanos, me parecen de hace un siglo y sonrío al recordarlos. ¡Qué bien sienta el verano…!