Pues muy probable porqué aunque todo el mundo las lleve (y me da igual comprarlas y encontrarme rodeada de ellas por la calle), o tienes la cara o no la tienes (cara apta e ideal para que te encajen). La cuestión es que después de meses pensando en comprármelas, me acerco a la óptica y… horror! Me quedan mal mal… Qué hacer entonces si estás tan enamorad@ de ellas??? Seguir soñándolas pero en la distancia. Hay que tener muchos c… para comprárselas quedándote mal.
PD: Quizá tenía un mal día y vuelvo otro a probármelas de nuevo. Quién sabe si entonces me veré estupenda…